LIBRO DE JUECES: 1ª PARTE

JUECES 1ª PARTE

1. TÍTULO:

El título del libro de los jueces fue probablemente sugerido por el versículo 16 del Cap. 2 que dice: “Jehová levantó jueces que los librasen de mano de los que les despojaban.” La palabra hebrea traducida por “jueces” significa más bien “libertadores” o “salvadores”, puesto que el carácter de los hombres descritos en este libro se ajusta más a los dos últimos mencionados.

Los jueces eran personas llenas del E. Santo que en épocas de emergencia nacional conducían al pueblo a la guerra, y tras libertarlos de la opresión extranjera, continuaban dirigiendo los destinos de la nación en la paz. Ejercían las funciones de magistrados militares y civiles.

2. MENSAJE:

1. El fracaso humano. Nuestra predisposición de apartarnos de los caminos del Señor y los resultados de esta desviación espiritual.

2. El poder de la oración en emergencias. La Gracia de Dios que busca y restaura a los que claman a Él y se apartan del camino.

Debido a que este libro recuerda las reincidencias trágicas de Israel cuando se apartaba de los caminos del Dios vivo, nos enseña dos cosas:

Primero la predisposición perpetua del corazón humano a apartarse de los caminos de Dios. Este libro nos dice muy claro la posibilidad que siempre existe de enfriarse espiritualmente aún después de grandes bendiciones de lo Alto.

En segundo lugar también nos enseña que no solo es un libro que describe los fracasos espirituales, sino que es también un libro de liberación.

SI HAY SIETE APOSTASÍAS Y SIETE SERVIDUMBRES, HAY  TAMBIÉN SIETE CLAMORES A DIOS Y SIETE LIBERACIONES. VEMOS AQUÍ QUE DIOS BUSCABA Y RESTAURABA VEZ TRAS VEZ A SU PUEBLO APOSTATA.

3. VERSÍCULOS CLAVES:

“En estos días no había rey en Israel; cada uno hacía lo que bien le parecía.” Cap. 21:25

“Dejaron a Jehová el Dios de sus padres, que los habían sacado de la tierra de Egipto, y se fueron tras otros dioses, los dioses de los pueblos que estaba en sus alrededores, a los cuales adoraron; y provocaron a ira a Jehová.

Y dejaron a Jehová, y adoraron a Baal y a Astarot.

Y se encendió contra Israel el furor de Jehová, el cual los entregó en manos de robadores que los despojaron, y los vendió en mano de sus enemigos de alrededor; y no pudieron ya hacer frente a sus enemigos.

Por dondequiera que salían, la mano de Jehová estaba contra ellos para mal, como Jehová había dicho, y como Jehová se lo había jurado; y tuvieron gran aflicción.

Y Jehová levantó jueces que los librasen de mano de los que les despojaban” Cap. 2: 12-16

4. PALABRA CLAVE:

No hay ninguna palabra en este libro que se pueda considerar clave.

5. SU AUTOR Y SU ORIGEN:

Según la tradición judía el libro fue escrito por Samuel y no se ha podido demostrar lo contrario. Si pensamos en la frase que se encuentra cuatro veces en los últimos capítulos: “En aquellos días no había rey en Israel” (17:6; 18:1; 19:1; 21:25) es bastante obvio que fue escrito después del establecimiento de la monarquía. Samuel como profeta y el último juez de Israel, bien pudo haberlo escrito cuando vivía en retiro parcial durante el tiempo que Saúl reinaba sobre la nación.

Sin duda alguna el escritor, a la hora de compilar el libro de Jueces empleó anales escritos dejados por jueces anteriores, relativos a la época y acontecimientos de su respectivo gobierno.

Cuando se escriben los capítulos que hablan sobre la historia de los diferentes jueces que se sucedieron probablemente el Arca no se encontrara en Silo (ver en el Cap. 18:30 “hasta el día del cautiverio de la tierra”) esta expresión ha sido interpretada como el tiempo que estuvo el Arca capturada por los filisteos. Se supone que en el texto original la última letra de la expresión “ cautiverio del país” ha sido alterada. El original tendría una nun (n) en lugar de la tsade (s), lo que entonces se traduciría por “cautiverio del Arca”

6. EL ESTILO:

Es un libro histórico. Tenemos recogidas algunas de las más dramáticas historias del A. T. y uno de los más antiguos cantos de batalla: el de Débora.

Los dos primeros capítulos son una introducción que forman un puente de unión entre este libro y el anterior (Josué).

En la triple división de la Biblia en hebreo –La Ley, los Profetas y los escritos- el libro de los Jueces se halla comprendido entre los Profetas.

Cuenta las historias de los 13 jueces que gobernaron y libraron a Israel desde la muerte de Josué hasta la época de Elí y Samuel.

    

                                          

Es muy valioso por las pruebas históricas que presenta sobre el desarrollo de la religión de Israel durante los primeros años de la conquista. Abarca períodos de transición que se inician con la vida incierta y desintegrada de las tribus, hasta la organización de una federación que finalmente culminaría en la formación de la monarquía.

Las luchas internas de las diversas tribus, así como sus problemas individuales, en medio de una población extranjera, se ve con más claridad en el libro de Jueces que en todo el Pentateuco o en el libro de Josué.

   

ES UN LIBRO TRISTE: Relata el período entre la conquista de Canaán y la muerte de Josué, hasta los tiempos de Samuel y el establecimiento de la monarquía. Israel se apartaba de Dios repetidamente y el libro de jueces es el registro divino de aquellos acontecimientos. Fue un tiempo triste de decadencia nacional y uno de los períodos más oscuros de su historia. PERO NO ES TODO OSCURIDAD, TRISTEZA Y PESIMISMO: Debido a que el libro de jueces hace resaltar los fracasos repetidos de Israel, da la impresión de que la mayor parte de los años que gobernaron fueron de pecado y rebelión. Sin embargo no era así, porque la mayor parte de este tiempo el pueblo permaneció fiel a Dios. El libro de Rut abre una ventana sobre aquel tiempo oscuro para darnos un vislumbre encantador de lo que era la vida cotidiana normal durante aquella época. Esta impresión errónea se debe al énfasis sobre los pecados de Israel los cuales aparecen con todos detalles feos.

Probablemente los diferentes jueces no gobernaron consecutivamente. Si sumamos los diferentes períodos en que gobernaron obtendremos un total de 410 años. Sin embargo, 1º de Reyes 6:1 dice que hubo solamente un período de 480 años desde el éxodo hasta el cuarto año del reinado de Salomón (c.965 a. De J. C.). Esto dejaría solamente un margen de setenta años donde habrían que incluirse:

• Los 40 años de peregrinación por el desierto
• El tiempo que llevó la conquista de Canaán por Josué
• El período de Elí, de Samuel, de Saúl y de David

Evidentemente, es necesario un reajuste en la cronología. Aparentemente varios de los jueces ejercieron su autoridad solamente sobre una parte de Israel y gobernaron simultáneamente con otros. Si esto es así, el período puede ser fácilmente reducido a 300 años, que es un período más razonable. Pero si el éxodo tuvo lugar sobre el año 1400 a. De J. C. el período debe ser reducido todavía más.

7. ANÁLISIS:

A primera vista, parece que no hay ningún orden en este libro. Ciertamente no están en orden cronológico. En realidad el libro debería empezar con el Cap 2: 6 al vers. 9 , luego el Cap. 1, seguido por el Cap. 2: 10 al vers.13 y seguir con Cap. 17 al Cap. 21, y finalmente del Cap. 2: 14 hasta el final del Cap. 16.

Aunque tener las cosas bien ordenadas el la primera ley del cielo, hay razones divinas para no haber escrito este libro en sucesión cronológica. Así de esta manera al elaborar su análisis vemos lo siguiente:

En la 1ª sección: Israel depende del Señor

En la 2ª sección: Israel se aparta de Dios y los resultados amargos que esta separación producen.

En la 3ª sección: Israel se hunde en verdaderas profundidades abismales: Anarquía

                                       

BOSQUEJO DEL ANÁLISIS

APARTADO (A): INTRODUCTORIO
1ª SECCIÓN: ISRAEL DEPENDE DEL SEÑOR
CAPÍTULOS : 1 Y 2 VERSÍCULO CLAVE: Cap. 1:1
Israel empezó bien, pero no continuó en los caminos rectos del Señor. Consultaron al Señor y el resultado de ello. Cap. 1: 1-10 Judá comienza la conquista de su territorio dando ejemplo a las demás tribus. Cap.1:3-4 La captura de Adoni – Bezek. Cap. 1: 5 – 7 Victorias incompletas. Cap. 1: 8-36 El reproche del Señor. Cap. 2: 1-5
APARTADO (B): HISTORIA DE LA APOSTASÍA Y SUS RESULTADOS, DE LA LIBERACIÓN Y RESTAURACIÓN
2ª SECCIÓN: ISRAEL SE APARTA DE DIOS y algunos de los resultados
CAPÍTULO 2:6 al CAPÍTULO 16 VERSÍCULO CLAVE: Cap. 2: 12
Muy pronto Israel se apartó de los caminos del Señor y los Cap. 2: 6 al Cap. 23, nos da un resumen muy amplio de su historia subsiguiente.
Las 7 apostasías	Opresores	Años De Opresión	Jueces o libertadores	Años De Descanso
Primera Cap. 3:1-11	Cusan-risataim rey de Siria (Mesopotámia)	8	Otoniel, de Debir (sur de Hebrón) sobrino o hermano menor de Caleb.	40
Segunda Cap. 3:12-31	Eglón rey de Moab junto con amonitas y amalecitas. Filisteos.	18	Aod, benjamita (zurdo) y Samgar, hijo de Anat.(Salvó a Israel de los Filisteos)	80
Tercera Cap. 4 y 5	Jabin, rey de Canaán y Sísara	20	Débora de Efraín (1ª mujer líder de Israel) Barac de Neftalí	40
Cuarta Cap. 6 al Cap.8:32	Madianitas Amalecitas Árabes (Ismaelitas)	7	Gedeón (Jerobaal) hijo do Joás, de la tribu de Manasés	40
Quinta Cap.8:33 al Cap. 10:5	Guerra civil	------------	Abimelec (usurpador) hijo de Gedeón y su concubina. Tola, de Isacar Yair, de Galaad, Manasés oriental	3 23 22
Sexta Cap. 10:6 al Cap.12	Amonitas	18	Jefté, de Galaad, Manases oriental Ibzán, de Belén Elón, de Zabulón Abdón, de Efraín	6 7 10 8
Séptima Cap. 13 al 16	Filisteos	40	Sansón, de Dan, hijo de Manoa de la ciudad de Zora	20

                                                          

APARTADO (C): APÉNDICE

3ª SECCIÓN: ANARQUÍA (Filosofía del mundo actual) resultado final de una larga serie de apostasías

CAPÍTULOS: 17 al 21 VERSÍCULO CLAVE: Cap. 17: 6

Confusión y Anarquía. En la vida religiosa de la nación. Cap. 17 y 18 En la vida casera y en la moralidad de la nación. Cap. 19 En la vida política de la nación. Cap. 20 y 21 NOTA: El primer sacerdote idólatra fue Jonatán, hijo de Gersón y nieto de Moisés. Cap. 18:30

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PERSONAJES DE LA BIBLIA (1): NOÉ

1. NOÉ

Noé significa "descanso", Tranquilidad". Era hijo de Lamec, descendiente de Set. Todo lo que sabemos de el se encuentra en el libro de Génesis capítulos del 5 al 10.

Génesis 6: 5- 8

5.Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal.

6.Y se arrepintió Jehová de haber hecho hombre en la tierra, y le dolió en su corazón.

7.Y dijo Jehová: Raeré de sobre la faz de la tierra a los hombres que he creado, desde el hombre hasta la bestia, y hasta el reptil y las aves del cielo; pues me arrepiento de haberlos hecho.

8.Pero Noé halló gracia ante los ojos de Jehová.

La Biblia nos habla que en los tiempos de Noé la tierra estaba llena de violencia y corrupción. La maldad era tal que Dios se entristeció y decidió destruir de la faz de la tierra toda vida creada; pero Noé, dice, halló gracia ante los ojos de Jehová, es decir, que solo una persona había sido hallada justa, y movido a compasión decidió salvarla junto a su familia.

No tenemos mucha información respecto de este hombre, excepto lo que la Palabra de Dios dice en el libro de Génesis en los capítulos del 5 al 10. Es fácil pensar que la vida de este personaje no fue fácil, si meditamos un poco nos daremos cuenta lo complicado que tuvo que resultarle vivir en una sociedad corrupta, llena de violencia e inseguridad y mantenerse limpio e integro sin caer en los mismo pecados y vicios que sus vecinos. Posiblemente sufrió en sus carnes y fue testigo de numerosas injusticias que le llevarían en medio de su angustia e impotencia a clamar a Dios y a esperar en Él.

Y aunque a veces Dios tarda en responder a nuestras oraciones, ciertamente que no se olvida de nosotros y en su tiempo responde.

La fidelidad de Noé le valió que Dios no destruyera totalmente la vida creada y le salvara junto con su familia y una representación de animales que después del diluvio poblarían nuevamente la tierra.

Obedeciendo el mandato de Dios, se pone manos a la obra y comienza a construir un arca de dimensiones gigantescas que tardó cien años en terminarla. Si ya era difícil mantenerse firme ante una sociedad depravada y violenta, imagina las burlas, los insultos y las amenazas que tuvo que sufrir durante los cien años que duró su construcción, entre otras cosas porque no sería agradable a las gentes de su época recibir la noticia de que la tierra iba a ser destruida por causa de su maldad y que solo se salvarían Noé y su familia. Vivir cien años bajo esa presión y seguir adelante sin tirar la toalla nos revela a un hombre lleno de fe y de una gran perseverancia, cuyo resultado fue el pacto que Dios hizo con el y sus descendientes de no volver a enviar un nuevo diluvio que destruyera la tierra.

Génesis 9: 8-11

8.Y habló Dios a Noé y a sus hijos con él, diciendo:

9.He aquí que yo establezco mi pacto con vosotros, y con vuestros descendientes después de vosotros;

10.y con todo ser viviente que está con vosotros; aves, animales y toda bestia de la tierra que está con vosotros, desde todos los que salieron del arca hasta todo animal de la tierra.

11.Estableceré mi pacto con vosotros, y no exterminaré ya más toda carne con aguas de diluvio, ni habrá más diluvio para destruir la tierra.

Sin embargo, Noé no era un hombre perfecto, como todo ser humano, tenía sus pasiones, sus debilidades..., y prueba de ello fue el triste acontecimiento que relata la Biblia de su embriaguez y como fue sorprendido desnudo por su hijo Cam, quien de inmediato contó a sus hermanos el estado lamentable de su padre. Noé, molesto por lo sucedido, al dirigirse a sus hijos maldice a Canaán (hijo de Cam) y bendice a Sem y a Jafet, con palabras proféticas cuya transcendencia fue de gran importancia si tenemos en cuenta que mucho tiempo después los descendientes de Canaán (Cananeos, sidonitas, Amorreos, jebuseos, fenicios...) pelearían contra los descendientes de Sem.

¿Por qué Noé maldice a su nieto en vez de a su hijo que fue el causante de su malestar?

No tenemos una respuesta en la Biblia al respecto, pero es de suponer que si en Génesis 9: 1 Dios Bendice a Noé y a sus hijos, este, no se atreviera a maldecir a quien ya Dios había bendecido.

Sus palabras fueron proféticas y se cumplieron en el tiempo.

Génesis 9: 20-27

20.Después comenzó Noé a labrar la tierra, y plantó una viña;

21.y bebió del vino, y se embriagó, y estaba descubierto en medio de su tienda.

22.Y Cam, padre de Canaán, vio la desnudez de su padre, y lo dijo a sus dos hermanos que estaban afuera.

23.Entonces Sem y Jafet tomaron la ropa, y la pusieron sobre sus propios hombros, y andando hacia atrás, cubrieron la desnudez de su padre, teniendo vueltos sus rostros, y así no vieron la desnudez de su padre.

24.Y despertó Noé de su embriaguez, y supo lo que le había hecho su hijo más joven,

25.y dijo: Maldito sea Canaán; Siervo de siervos será a sus hermanos.

26.Dijo más: Bendito por Jehová mi Dios sea Sem, Y sea Canaán su siervo.

27.Engrandezca Dios a Jafet, Y habite en las tiendas de Sem, Y sea Canaán su siervo.

CONCLUSIÓN

Noé creyó a Dios y a pesar de la oposición que encontró en el camino no desistió de luchar para mantenerse integro. No somos muy diferentes de el, vivimos tiempos donde la falta de fe, la corrupción y la violencia van en aumento, es difícil no contaminarse en medio de tanta podredumbre, pero si nuestra fe está bien cimentada podremos perseverar y salvar nuestra vida y quien sabe si con nuestra actitud y ejemplo contribuimos sin saberlo a salvar la vida de muchos.

Cuando Noé se embriagó, no fue un pecado propiamente dicho, en realidad fue una pequeña debilidad que se permitió como consecuencia de que estaba contento de recoger el fruto de su viña. La tierra estaba tranquila, no tenía luchas ni problemas, en realidad se podría decir que tenía mucho tiempo libre para estar ocioso.

La ociosidad es peligrosa, diría que es más fácil mantenernos firme en las pruebas y desiertos que en los tiempos de bonanza y reposo, pues al relajarnos bajamos la guardia y nos hace vulnerables a caer en cualquiera de las tentaciones que se nos presentan.

Fruto de esa ociosidad Noé se embriagó y maldijo a su nieto y a su descendencia.

Cuidemos nuestra actitud y nuestras palabras las cuales tienen mucho poder, tanto para bueno como para malo, y cuidemos también que la ociosidad no gobierne nuestras vidas, sino que por el contrario, seamos diligentes y solícitos en hacer lo bueno delante de Dios y de los hombres.

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LIBRO DE JOSUÉ

JOSUÉ

1º. TÍTULO: El nombre de Josué significa “Yahvé es Salvación”.

2º. MENSAJE: DIOS DECLARA QUE ES FIEL Y ESA FIDELIDAD QUEDA DEMOSTRADA.

Así como Génesis es el libro de los principios, Éxodo es el libro de la Redención, y Levítico el libro de la Reconciliación, y muestra la doctrina del Espíritu Santo en cuanto a nuestro acceso a Dios. Números es la historia del desierto y el cuadro de nuestra peregrinación aquí abajo; y especialmente del fracaso del pueblo de Dios en tomar posesión de su herencia y Deuteronomio, es el libro que nos relata la segunda oportunidad de partida del pueblo de Dios después de la triste experiencia de fracaso y pecado. Y la culminación de todo esto se halla en el libro de Josué que relata la entrada efectiva a la Tierra Prometida.

El mensaje de este libro es mucho más que un mero relato de guerras. Tiene un mensaje cuádruple:

1. ESTE LIBRO PROCLAMA LA FIDELIDAD DE DIOS.

Su tema principal es acerca de la fidelidad de Dios. (Estudiar los versículos claves)

2. PARA DISFRUTAR DE LO QUE DIOS PROMETE DARNOS ES NECESARIO APROPIARSE DE ELLAS. Cap. 1: 3

3. ESTE LIBRO NOS ENSEÑA CON TODA CLARIDAD EL HORROR Y EL ODIO QUE DIOS SIENTE CUANDO CONTEMPLA EL PECADO Y ESPECIALMENTE LOS PECADOS GROSEROS Y ABOMINABLES.

Fue una guerra punitiva (de castigo). Los Cananeos estaban hundidos en el pecado, practicando los vicios y pecados más groseros y dañinos. Por esta razón Dios no tuvo más remedio que desenvainar su flamante espada de justicia.

4. EN CUARTO LUGAR AQUELLA CAMPAÑA MILITAR TIPIFICA LA GUERRA DEL ESPÍRITU.

Los cananeos representan nuestra lascivia, nuestros pecados más obsesionantes y nuestros enemigos espirituales. No obstante; al mismo tiempo, nos encontramos en ese libro el secreto de una vida de victoria.

ALGO QUE HACE ESTE LIBRO NOTABLE:

Introduce un nuevo método de enseñanza. Hasta aquel entonces Dios solía hablar a su pueblo mayormente por medio de sueños, visiones o por el ministerio de ángeles. Pero ahora exhorta al pueblo a escuchar la voz de Dios sonando desde su Palabra escrita. Capítulo 1: 8

“Nunca se apartará de tu boca este libro de la Ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.”

El énfasis persiste hasta el día de hoy, e independientemente de que la Biblia tiene más contenido que el libro de la Ley que poseía Josué, sin embargo, la autoridad era la misma.

Aunque hay un gran énfasis sobre la importancia de la Palabra de Dios como el último árbitro de cualquier discusión, esto no quiere decir que los sueños, las visiones y el ministerio de ángeles han cesado, y en verdad que desde el día de Pentecostés el Espíritu de Dios ha sido derramado sobre toda carne y los nueve dones del Espíritu Santo se añaden a las demás revelaciones. Joel 2:28 y 29; Hechos 2: 16 y Corintios 12: 4-10.

3º. VERSÍCULOS CLAVES: Capítulo 11 versículo 23 y Capítulo 21 versículos 44 y 45. “Tomó, pues, Josué toda la tierra, conforme a todo lo que Yahvé había dicho a Moisés; y la entregó Josué a los israelitas por herencia conforme a su distribución según sus tribus; y la tierra descansó de la guerra.” “Y Yahvé les dio reposo alrededor, conforme a todo lo que había jurado dar a sus padres, y ninguno de todos sus enemigos pudo hacerles frente, porque Yahvé entregó en sus manos a todos sus enemigos. No faltó palabra de todas las buenas promesas que Yahvé había hecho a la casa de Israel; todo se cumplió.”

Israel recibe su herencia conforme a la promesa de Dios y tuvieron paz.

4º. PALABRA CLAVE: No aparece ninguna palabra clave.

5º. AUTOR Y ORIGEN:

No hay ninguna razón para dudar de que fue Josué EL autor de este libro. El Talmud (Comentarios de los judíos sobre el Antiguo Testamento) confirma que él escribió el libro entero con la única excepción de los últimos cinco versículos, los cuales fueron, probablemente añadidos por Finees (ver Cap.24:33). Ciertamente el libro fue escrito antes del tiempo de David. (Cap. 15:63). Fue David quien expulsó a los jebuseos (2ª de Samuel 5: 6-10), y quizás es posible decir antes de la muerte de Rahab (Cap. 6: 25).


En su forma actual el libro es posterior a Josué, cuya muerte registra. Quizá fuera escrito por uno de los “ancianos que sobrevivieron a Josué” quien empleó el material escrito por Josué mismo. (24: 26 y 24: 1-25).

Josué significa “Yahvé es salvación”. Era hijo de Nun, de la tribu de Efraín. Su nombre era al principio Oseas, y Moisés le cambió el nombre por Josué. “Estos son los nombres de los varones que Moisés envió a reconocer la tierra; y a Oseas hijo de Nun le puso Moisés el nombre de Josué” Números 13:16 .


Es mencionado por primera vez en Ex.17: 9 cuando vence a los amalecitas en Refidim.

Se convirtió en el ayudante de Moisés y lo acompañó parte del camino hacia el monte Sinaí cuando Dios dio al Pueblo los diez Mandamientos y posteriormente fue encargado del cuidado del primer Tabernáculo de reunión.

A los 40 años de edad fue uno de los doce espías enviados desde Cades a reconocer la tierra de Canaán junto a Caleb, dando un informe alentador sobre la tierra, lo que les valió la promesa de entrar en la Tierra Prometida, mientras que los otros diez murieron en el desierto.

Al final de los cuarenta años en el desierto, fue designado por Dios y ordenado como sucesor de Moisés, ante el sumo sacerdote y delante de toda la asamblea en Sitim. Inmediatamente después de la Muerte de Moisés Josué comenzó los preparativos para pasar el Jordán y envió espías para explorar Jericó.

Al comienzo de su campaña ocurrieron tres sucesos sobrenaturales que indicaban que Dios estaba con él.

• El río Jordán se divide cuando estaba a punto de desbordarse para dar paso al pueblo de Israel. (3:14-17)

• El Ángel de Yahvé se le aparece al lado de afuera de los muros de Jericó y le da instrucciones para atacar la ciudad. (5: 13-15 y 6: 2-5)

• Los muros de Jericó caen, permitiendo una victoria completa.(6: 12-21)

Josué cometió el error de hacer un pacto con los gabaonitas y de no dejar una guarnición en la ciudad de los Jebuseos después de su conquista. Estos dos fallos contribuyeron decisivamente al aislamiento de Judá de las tribus del norte (Cap. 9). Estos dos fallos enseñan la necesidad de una obediencia completa. (Jos. 7)

De aquí en adelante Josué continuó firme hasta que venció a treinta y un reyes y la mayor parte de la tierra fue sometida. Luego dividió la tierra entre las tribus, creó ciudades de refugio, dio ciudades a los levitas y dispuso que el Arca del Pacto quedara en Silo.

Cuando ya era muy anciano convocó la asamblea en Síquem, el lugar donde Abraham había erigido el primer altar a Yahvé, y pronunció un enérgico discurso, animando al Pueblo a no abandonar a Dios y a permanecer como una nación separada (santa). Murió poco después a la edad de 110 años y sepultado en el lugar que había elegido: Timnat-sera. Dejó una poderosa influencia sobre Israel.

6º. EL ESTILO:

Es un libro histórico que relata la campaña militar encabezada por Josué, el sucesor de Moisés, y por medio del cual Israel ganó la posesión de Canaán. Es un libro de conquista, y por lo tanto se relaciona con los Cinco Libros de la Ley de la misma manera que el libro de los Hechos de los Apóstoles se relaciona con los Evangelios.

7º. ANÁLISIS:

ENTRADA En la Tierra Prometida

Capítulos 1 a 5

1. El Señor llama a Josué (1: 1-9) 2. Yahvé llama a Israel y le da sus mandamientos para entrar y poseer la tierra. (1: 10-15) 3. El pueblo responde de buena gana (1: 16-18) 4. Rahab y los espías. (Cap. 2) 5. El cruce del Jordán (Cap. 3) 6. Los dos monumentos conmemorativos. (Cap. 4) 7. El efecto que todo esto causó en los enemigos. (5: 1) 8. Se quitó el oprobio de Egipto. (5: 2-10) 9. Nueva comida. (5: 11-12) 10. SU CAPITÁN. (5: 13-15) NOTA: La Ley (personificada en Moisés) no puede dar al pecador ninguna posesión. (1:2) Los israelitas no vieron el agua cuando cruzaron el Jordán. (3: 16)

CONQUISTA De la tierra Prometida

Capítulos 6 a 12

Se lleva a cabo la conquista de Jericó de una manera insólita. (Cap. 6) NOTA: Durante seis días el único sonido que se oía vino del lado del Arca, para que la gente fijara su atención solo en el Señor. (6: 8) El pecado de Acán (Cap. 7) La conquista de Hai (8: 1-9) La Ceremonia en el Monte Ebal (8: 30-35) NOTA: El altar fue construido en el monte de maldición, vea Deut. 11: 29 a 27: 12 La alianza con los Gabaonitas. (Cap. 9) VICTORIA EN: Gabaón (10: 1-27) Maceda (10: 28) Merom (Cap. 11) La lista de los reyes conquistados. (Cap. 12) NOTA: El pecado de Israel de AUTO-CONFIANZA (7: 3) El pecado de Acán tuvo cuatro etapas: “Vi” -Los deseos de los ojos.- “Codicié” -El deseo de la mente- “Tomé” –Un acto de la voluntad- “Los escondió”. –Quiso cubrir su pecado.-

DIVISIÓN De la Tierra Prometida

Capítulos 13 a 22

El mensaje del Señor a Josué. Cap. 13 El repartimiento de la tierra. Cap. 14 al 21 La equivocación que hicieron las dos tribus y media. Cap. 22 NOTA: Hebrón, que significa “compañía” fue dado a Caleb porque era cien por cien por su Dios. Cap. 14: 14 La hija de Caleb supo muy bien como cuidar de sus intereses. Cap.15: 16-19 La noble y digna respuesta de Josué. Cap. 17: 14 – 18 Josué recibió su herencia después de todos los demás. Lo mismo que Caleb, le permitieron escoger su lote, y eligió un lugar árido que los demás hubieran rechazado. Cap. 19: 50

DESPEDIDA De Josué su líder

Capítulos 23 a 24

El último discurso de Josué: A los ancianos del pueblo. Cap. 23 A todo el pueblo. Cap. 24: 1-28 La muerte de Josué. Cap. 24: 29-31 La muerte de Eleazar. Cap. 24: 33 NOTA: El Génesis empieza con Dios y termina con la muerte. El libro de Josué empieza y termina con la muerte. Cap. 24:33 Los Sacerdotes no recibieron lotes de tierra, sin embargo, parece que este versículo prueba que Finees si las tenía. Es probable que la dieron en recompensa por un servicio especial.

8º. SÍNTESIS:

El libro de Josué es la continuación, podríamos decir así del Pentateuco. Moisés murió en la tierra de Moab, a la vista de la Tierra Prometida (representa el Cielo). A Josué, su sucesor, le correspondía la misión de dirigir al pueblo de Israel a través del Jordán y en la tierra prometida.

La mayor parte del libro describe la conquista de Canaán y la división de la tierra entre las tribus de Israel. Después de la caída de Jericó y de Hai, y de la capitulación de Gabaón, en la región central de Canaán, Josué tuvo que afrontar dos coaliciones sucesivas de estados cananeos, una en la región meridional capitaneada por el rey de Jerusalén, y la otra en el norte bajo las órdenes de Jabín en Azor. Contando con la ayuda divina, Josué pudo conquistar tanto el sur como el norte, y distribuir la tierra entre las tribus. Sin embargo, se formaron grupos de resistencia, y cada una de las tribus tuvo la responsabilidad de ocupar la tierra asignada a ella. El libro de Josué registra la historia del Israel desde el nombramiento de Josué como sucesor de Moisés hasta su muerte a la edad de 110 años.

Curiosidades y otros datos de interés

A pesar de que las Tribu de Rubén, Gad y media tribu de Manasés escogieron su heredad al otro lado del río Jordán, no reposaron en su tierra hasta que Canaán fue conquistada y repartida. Aunque pertenecían a diferentes tribus, eran parte de un mismo pueblo. La Iglesia es una con Cristo, a pesar de la diversidad de sus miembros, así que las luchas espirituales de cada miembro no deberían pelearse en soledad. Si somos un cuerpo no podemos vivir al margen de las necesidades de los demás, sus luchas son nuestras luchas y sus logros y triunfos también lo son . Nuestra oración e intercesión juega un papel fundamental para que otros puedan conquistar su porción de “Tierra Prometida” y disfruten de su heredad.

Canaán era para los israelitas el cumplimiento de la Promesa a Abraham, su herencia. Para nosotros , nuestro Canaán es el reposo de Dios aquí abajo, una condición y experiencia de victoria, poder y plenitud de la Cristo. Esta es la herencia de los santos.

Tipos de muerte representados en Josué

Gálatas 2: 20

“Con Cristo estoy juntamente crucificado, y vivo, no ya yo, más vive Cristo en mí: y lo que ahora vivo en la carne, lo vino en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó, y se entregó a sí mismo por mí”.

Esta es la gran verdad que se halla escondida en el simbolismo del libro de Josué. Entraron en la Tierra Prometida, el gran tipo de nuestra herencia en Cristo, por la puerta de la sepultura.

Cuatro sepulturas se nos presentan en estos capítulos iniciales:

LA SEPULTURA DE LA LEY “Mi siervo Moisés es muerto: levántate pues ahora, y pasa este Jordán, tu y todo este pueblo”. La muerte de Moisés. Este representaba la Ley, el esfuerzo humano, por tanto Moisés tenía que quebrantar su propia Ley. La santificación es por la gracia no por el esfuerzo. LA SEPULTURA DEL YO Y DEL PECADO “...Levántate pues ahora, y pasa este Jordán”. El Jordán es símbolo de la muerte y del juicio, y cruzarlo es pasar de pertenecernos a nosotros mismos a ser de Cristo. Exige una entrega total, la muerte del Yo, y esto no es posible sin la ayuda de Dios. Jesús nos guía a las aguas de la muerte, permanece con nosotros en ella, y tiene que conducirnos hasta sacarnos al otro lado. El Arca representa a Cristo. EL SEPULCRO EN GILGAL Lugar donde todos los varones del pueblo fueron circuncidados después de cruzar el Jordán. Si el cruce del Jordán expresa el lado de la fe de nuestro morir al yo, la circuncisión en Gilgal, es el lado experimental de dicha muerte. Representa el dolor , las pruebas, y la experiencia de renunciar día a día a nuestro Yo. LA SEPULTURA DE JOSUÉ Morir a nuestra propia suficiencia y potencia. No puede haber dos comandantes; usted o Cristo. Ambos no pueden mandar.

La herencia del Amor

“ Por tanto Hebrón fue de Caleb, hijo de Jephone Cenezeo, en heredad hasta hoy; porque cumplió siguiendo a Yahvé Dios de Israel”.

La Ciudad de Hebrón es aún hoy día uno de los lugares más interesantes de Palestina. No es sorprendente que Caleb se interesara por esta heredad selecta, reclamándola para sí.

Caleb fue uno de los espías fieles que regresó de la Tierra a Cades y alentó al pueblo para que entraran y poseyeran la tierra. Ante la negativa del pueblo esperó cuarenta años hasta que esa generación incrédula murió. Durante más de cuatro años se mantuvo hombro a hombro con su gente luchando por la conquista de la Tierra Prometida hasta que el último rey fue sometido. Entonces reclamó su propia heredad, y con justicia la recibió.

Hebrón representa una herencia especial. Dios no se enfada por reclamar nuestra herencia, Él deja que cada uno determine por sí mismo cuanto hemos de poseer. Hebrón representa lo mejor de Dios, una victoria ganada en dura lucha. Representa la victoria de la fe que espera. Era la realización de la visión de una vida entera. Era el cumplimiento de una esperanza largamente diferida.

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